Un importante factor de riesgo en el tránsito
La distracción de los conductores de vehículos es un importante factor de riesgo en las calles y avenidas de nuestras ciudades. Y de todos los tipos de distracciones, el uso del celular es el que se observa con más frecuencia en el tránsito. Es fundamental que se tome conciencia de que el conductor no debe perder la capacidad de concentración que necesita para circular con seguridad en la vía pública sin provocar daños a otras personas o a sí mismo.
A la hora de conducir un vehículo motorizado, una distracción -por más breve que sea- se traduce en la imposibilidad de mantener la distancia de seguridad suficiente con el vehículo que circula por delante y el tiempo de reacción aumenta considerablemente entre medio y dos segundos, dependiendo del conductor.
Estudios realizados en distintos países indican que el porcentaje de conductores que utiliza el teléfono celular mientras conduce ha aumentado a lo largo de los últimos 5 a 10 años, y oscila entre un uno por ciento y un once por ciento. Y las ciudades de nuestra provincia no son la excepción. Está comprobado que, en estos casos, el uso del teléfono móvil hace que el conductor desvíe la mirada de la calle o ruta por la que circula y que, además, retire las manos del volante. Ambas acciones son, de por sí, suficientes para aumentar el riesgo de provocar algún siniestro vial.
En el documento "Uso del celular al volante: un problema creciente de distracción del conductor", publicado por la Organización Mundial de la Salud, se advierte que los conductores jóvenes suelen utilizar el teléfono celular cuando conducen con mayor frecuencia que los conductores de mayor edad y son muy vulnerables a los efectos de la distracción, dada su poca experiencia al volante.
Si bien es difícil determinar los efectos del uso del teléfono celular en el riesgo de accidente -señala la OMS-, existen estudios que confirman que los conductores que utilizan el teléfono celular durante la conducción corren un riesgo aproximadamente cuatro veces mayor de verse involucrados en un accidente.
Por su parte, el Observatorio de la Agencia Nacional de Seguridad Vial advierte que, además del celular, las principales distracciones entre conductores de vehículos de cuatro ruedas son: fumar (3,2%), comer o beber (1,9%) y portar objetos sobre sí o en las manos (1,4%). De acuerdo con el perfil de conductores distraídos, las mujeres representan 20,2 por ciento y los varones 16,1. El rango etario es liderado por jóvenes de entre 18 y 35 años (21,5%), seguido por personas de entre 36 y 49 años (16,5%).
Se debe recordar, además, que intentar leer un mensaje de texto o entablar una conversación por algunos de los sistemas de mensajería instantánea cuando se está al frente del volante de un vehículo en movimiento no es una buena idea. Puede resultar tanto o más peligroso que atender una llamada de voz y es por eso que deben quedar en claro los riesgos que generan estas distracciones.
Como ya lo hemos señalado en otras oportunidades, no debemos desconocer lo útil que resulta en la actualidad disponer de un teléfono móvil, pero eso no significa que se puede recibir o hacer una llamada en cualquier lugar y en cualquier momento. Si alguna persona, mientras conduce un vehículo, está esperando una llamada urgente o recibe un mensaje de texto, lo que debe hacer es detener la marcha del vehículo en un lugar seguro para poder atender y tomarse el tiempo que necesite para responder con tranquilidad.
Según la organización de la sociedad civil "Luchemos por la Vida", sobran estudios que confirman que el hábito de hablar mientras se conduce un vehículo es un importante factor de riesgo en el sistema de tránsito. En ese sentido, la entidad señala que al cabo de un minuto y medio de hablar por el móvil el conductor no percibe el 40 por ciento de las señales, además la velocidad media del vehículo se reduce entre 10 y 12 por ciento, mientras que el ritmo cardiaco del conductor se acelera en forma brusca durante la llamada y tarda más en reaccionar.
El uso inadecuado de los celulares cuando se está frente a un volante puede tener resultados lamentables. Por eso es importante evitar estas y otras distracciones y, al mismo tiempo, colaborar entre todos para promover hábitos más seguros en la conducción.