La exdirigente Élida Mambrín, condenada por trata y abuso sexual: no mostró apego a las normativas
El 2022 fue un año complejo nuevamente para Élida Mambrín, viuda de Rolando ‘Kilo’ Vallejo, cuyo matrimonio cubriéndose detrás de una fundación que era asistida por el estado, se dedicó a reclutar mujeres que recibían becas y las obligaban a prostituirse. Se sabe que la mujer fue condenada a 15 años, pero en estos meses volvió a ser noticia nuevamente.
Mambrín tiene que cumplir una larga estadía en prisión y para peor, este año el Tribunal Oral Federal de Resistencia concedió al abogado querellante Ítalo Suligoy y al fiscal general Federico Carniel el pedido de que sea revocada la prisión domiciliaria, luego que la mujer incumpliera restricciones que se le habían impuesto en la condena.

Mambrín demostrando no tener apego a la ley, no tuvo reparos en identificar con nombre y apellido a una de sus víctimas, de la que abusó sexualmente con Vallejo y la obligó junto a otras jóvenes a prestar servicios sexuales a funcionarios provinciales, municipales, policiales, empresarios, comerciantes y comunicadores. Si no lo hacían, sabían ellas que perderían la beca Plan de Fortalecimiento Comunitario (FOCO).
La causa se conoció como ‘No me olvides’, nombre de la fundación que dirigió la condenada y que fue usada para reclutar a las víctimas, junto con su extinto esposo Vallejo y la secretaria del matrimonio Lorena Quintana, la que recibió una pena de tres años en suspenso.

El juicio que se realizó en la justicia federal en 2021 significó un antecedente para combatir la explotación sexual, derivando en nuevas investigaciones a cargo de la jueza Zunilda Niremperger, debido a que las víctimas declararon sobre los sometimientos y ofrecieron detalles de los clientes.
El Tribunal integrado por Enrique Jorge Bosch y Juan Manuel Iglesias, le dio lugar a Suligoy y al fiscal general Carniel, quienes se basaron en la gravedad del delito y la dura condena que recibió Mambrín, pese a que ella había fundamentado de recibir prisión domiciliaria porque tenía a cuidado a un hijo con discapacidad, el cual ya es mayor de edad. Fue primero alojada en el Escuadrón 51 y luego en el Centro de Mujeres del barrio Don Santiago.
Cara a cara con su denunciante y niños de un jardín de infantes
Otro escándalo protagonizado por Mambrín y una vez más, alejada de las pautas para una persona privada de la libertad por un grave delito, fue vísperas a la celebración del Día de las Infancias. Mantuvo contacto con niños que asisten al Jardín de Infantes 177, ubicado a tres cuadras de la cárcel, pero toda esa situación fue vivida por la madre de uno de los pequeños y víctima de los sometimientos ejercidos por ella y Vallejo.

NORTE pudo saber que los menores fueron invitados por las autoridades penitenciarias a un acto: fueron con sus padres y las maestras hasta el Salón de Usos Múltiples.
La celebración consistió en que los menores escucharan a la Banda de Música del Servicio Penitenciario Provincial (SPP), jugaran, cantaran y por último recibieran donaciones. La misma Mambrín entregó pizarrones y otros elementos, y tras los aplausos abrazó y besó a los niños.
Los menores asistieron a la cárcel con sus padres y las docentes: entre los mismos, estaba una víctima.
Una de las sobrevivientes que sacó a luz la red de trata que camuflaba la Fundación ‘No me Olvides‘, cuando vio a Mambrín antes del comienzo del acto, le hizo saber al personal penitenciario que esa mujer había sido condenada a quince años de cárcel y que no debía estar en la celebración porque estaban los niños.
Sin embargo, como respuesta se le dijo que Mambrín no estaba condenada sino procesada. Fue en vano que la testigo siguiera discutiendo y todo se realizó tal lo previsto. Mambrín, ante los menores, fue presentada como la ‘seño Eli’, y ‘procedía de Disney’.
Fue la previa de la intervención de la condenada, quien con micrófono en mano dirigió unas palabras a los presentes.
EL INFORME DE NORTE PLAY
El caso tomó rápida repercusión, luego de la difusión en NORTE Play de un video donde quedó registrado el suceso en la cárcel de mujeres. El abogado Suligoy denunció a las autoridades del establecimiento ante el Tribunal por lo ocurrido. Su presentación tuvo efectos, ya que la interna no fue autorizada por los jueces para asistir al acto de egreso de su hijo, teniendo en cuenta la repercusión que tuvo el informe de este diario y los riesgos que significaba que la detenida asista a la ceremonia, ‘en preservación de su integridad y la de terceros’, fue uno de los sustentos de los magistrados.
El primer político preso y que estará en el banquillo
El exsubsecretario de Transporte Roberto Medina por resolución de la Cámara Federal de Apelaciones, recibió el auto de procesamiento con prisión preventiva y está alojado en la Unidad Regional 7 de Resistencia. Es el primer eslabón de la política que deberá rendir cuenta el próximo año ante el Tribunal Oral, por el mismo delito que Élida Mambrín. Está acusado de explotación sexual, usaba a las becarias para ofrecerlas a otros políticos y las presionaba para que se prostituyan. O sea, Medina también sabía el plan de Mambrín y Vallejo: es más, cuando las víctimas entre 18 y 34 años comenzaron a resistirse a esos sometimientos, fueron desplazadas del área de la Tarjeta Sube que estaba bajo su órbita. A modo de castigo, presuntamente Medina les pedía a las denunciantes que se busquen otro lugar para cumplir con las horas a cambio de la beca del estado.

Medina fue mencionado por varias sobrevivientes durante el primer juicio, y una vez que se avanzó en la investigación, la jueza Zunilda Niremperger ordenó su detención. Los hechos que se les atribuye habrían sucedido a partir de 2017 y hasta 2019. Medina se desempeñó como subsecretario de Transporte en la gestión de Domingo Peppo.
En 2023, todavía sin fecha establecida se realizará el juicio oral, y en esas instancias podrían surgir nuevas pistas a investigar sobre las responsabilidades de exfuncionarios que también habrían consumido el servicio que promocionaba el matrimonio y Medina.