Papa Francisco: 10 años liderando con humildad
Al dispararse el humo blanco aquel 13 de marzo de 2013, escuchamos con alegría y gran sorpresa el nombre de Jorge Mario Bergoglio elegido como sucesor de Pedro en la Iglesia Católica.
En su presentación como Papa, Francisco no quiso pararse en la plataforma tradicional, eligió salir con su vieja cruz y sus zapatos negros, para tener contacto con el pueblo., tal como es simple, firme y espiritual. Sus primeros pasos esbozaron una mirada sencilla, agachando la cabeza ante la multitud, pidiendo su bendición y por sobre todo implorando que recen por él ante Dios, signos claros de un carisma y un modo de gobierno que llevó en su pontificado. Hasta con la elección de su nombre, que se inspiró en San Francisco de Asís, quiso enviar una señal de humanidad, mostrando con claridad la "opción preferencial por los pobres", los necesitados, los enfermos, los niños, los más desprotegidos y vulnerables.
Como todos los líderes eficaces, Francisco ha llevado una agenda múltiple, con claros objetivos, y pasos decididos para su implementación, pero por sobre todo, con una actitud de servicio, "nunca olvidemos que el verdadero poder es el servicio", proclamó el Papa Francisco en su misa inaugural.
"Un estilo de vida sobrio, humilde, dedicado al servicio vale mucha más que miles de seguidores en redes sociales… Nuestro mayor poder no es el respeto que los otros nos tienen, sino el servicio que podemos ofrecer a los demás. En cada acción que hacemos por los otros, sentamos las bases para restaurar la dignidad de nuestros pueblos y comunidades. Soñemos Juntos – Papa Francisco-.

Iglesia pobre para los pobres y sinodal
Según Francisco la realidad se ve mejor y más completamente no desde el centro, sino desde las periferias. Desde allí podemos contemplar -a los últimos y los pobres-, el mundo actual, su crisis y las respuestas que tenemos que darle.
Esta "opción preferencial por los pobres", no es un planteo novedoso del Papa Francisco, resurge desde Las Conferencias Generales Episcopales Latinoamericanas de Medellín (1968) a Aparecida (2007), es decir emergió en la Iglesia latinoamericana, para ser luego recogida por el magisterio universal de los Papas inmediatos predecesores (Juan Pablo II y Benedicto VII). Lo particular de Francisco es su deseo a lo concreto, en la salida de los muros de la iglesia, para vivir "con olor a oveja" de "una Iglesia pobre para los pobres", considerándolos no sólo como destinatarios sino también como protagonistas de la actual lucha pacífica global por la liberación integral.
En el comienzo de la encíclica Evangeili Gaudium (2013) Francisco nos dice sobre la necesidad de la "inclusión social de los pobres" partiendo "de nuestra fe en Cristo hecho pobre y siempre cercano a los pobres y excluido" (EG186) y hacer brotar desde allí "la preocupación por el desarrollo integral de los más abandonados de la sociedad. Su liderazgo no solo radica en decir, sino creer, hacer y vivir coherentemente como tal. Recordamos aquel primer viaje apostólico (8-7-2013) a la isla de Lampedusa –un lugar donde se sigue rescatando y acogiendo a miles de migrantes-, en donde denunció la "globalización de la indiferencia" hacia el prójimo, "¿Dónde está la sangre de tu hermano cuyo grito llega hasta mí?"… "Hoy nadie en el mundo se siente responsable de esto; hemos perdido el sentido de la responsabilidad fraterna"; en igual sentido condenará abiertamente "la cultura del descarte".
Vemos con un fuerte impulso de Francisco, las Jornadas Mundial de los Pobres realizadas en forma consecutivamente desde 2017 al 2022, donde se han visibilizado esa realidad dolorosa de la Pobreza, no solo llegando a pensarla y teorizarla, sino más bien sentirla en el corazón, para luego actuar en consecuencia, (ver, pensar y actuar). «No amemos de palabra sino con obras», sabiendo que "la esperanza de los pobres nunca se frustrará", afianzando como cristiano la necesidad y compromiso de "Tender la mano al pobre" (cf. Si 7,32); siendo que Jesucristo se hizo pobre (cf. 2 Co 8,9). Francisco.
Tierra, Techo y Trabajo
Francisco lo denomina "derechos fundamentales", fundados en la dignidad humana, todos somos hijos de Dios, iguales y semejantes. La incorporación de las 3 T al Magisterio Social de la Iglesia como criterios básicos de la justicia social "es posible anhelar un planeta que asegure tierra, techo y trabajo para todos" Fratelli Tutti 127. La tierra como bien común. Según el papa, Dios creó al ser humano como custodio de su obra, encargándole que la cultivara y la protegiera. A su juicio, esta vocación inicial comienza a deteriorarse hasta quedar truncada cuando se produce el acaparamiento de tierras, la deforestación, la apropiación del agua y la proliferación de agrotóxicos nocivos. Estos males, entre otros, arrancan al ser humano de su tierra natal, produciéndose una separación que no es solo física, sino existencial y espiritual, porque hay una relación con la tierra que está poniendo a la comunidad rural y a su peculiar modo de vida en notoria decadencia y hasta en riesgo de extinción.
Una casa para cada familia. Se parte de una triste y dramática constatación: hay tantas familias sin vivienda, porque nunca la han tenido o bien porque la han perdido por diferentes motivos. Para el papa, familia y vivienda van de la mano. Pero, además, un techo, para que sea hogar, tiene una dimensión comunitaria: el barrio. Es precisamente en este espacio donde se empieza a construir la gran familia de la humanidad, desde lo más inmediato, desde la convivencia con los vecinos. El reto propuesto por Francisco en este plano es seguir trabajando para que todas las familias tengan una vivienda y para que todos los barrios tengan una infraestructura adecuada que posibiliten vínculos de unidad.
Buscando la dignificación del trabajo, nos encontramos ante la realidad del desempleo juvenil, la informalidad y la falta de derechos laborales, realidades masivas y empobrecedoras. Pero no son inevitables, sino el resultado de una previa opción social, de un sistema económico que pone la rentabilidad por encima de la persona, generando una cultura del descarte que considera al ser humano como un bien de consumo, que se puede usar y luego tirar. Afirma que le interesa "una creación de fuentes de trabajo ... que supere el mero asistencialismo" (EG 204). Sostiene que "los planes asistenciales, que atienden ciertas urgencias, deberían pensarse sólo como respuestas pasajeras" (EG 202) Francisco también ha recordado que no puede haber tierra, techo y trabajo si no tenemos paz y destruimos el planeta. Explica que son temas tan importantes que los pueblos y sus organizaciones de base no pueden dejar de debatir. No pueden quedar solo en manos de los dirigentes políticos. Todos los pueblos de la tierra, todos los hombres y mujeres de buena voluntad, tenemos que alzar la voz en defensa de estos dos preciosos dones: la paz y la naturaleza, ha afirmado el papa Francisco en el Encuentro Mundial de Movimientos Populares 2014
¿Quién soy yo para juzgar?
En el regreso de sus visitas apostólicas (realizó 40 viajes preferentemente a Asia, África y América latina) tomo como costumbre hablar con los periodistas que lo acompañaban, y formuló la famosa frase ¿Quién soy yo para juzgar? el Papa Francisco nos invita a poner en práctica una de las grandes enseñanzas de Jesús: 'No juzguen para que no sean juzgados. De la manera en que juzgáis; seréis juzgados; y con la misma medida con que mides a otros; serás medido.
Si una persona, ya sea laica, un cura o una monja, comete un pecado y luego se convierte, Dios la perdona. Y cuando Dios perdona, Dios perdona, y eso es muy importante para nuestras vidas".
Firme rechazo a los abusos en la Iglesia. Perdón y acciones concretas
En igual sentido el papa Francisco no fue indiferente a los abusos cometidos en la Iglesia, por el contrario actúo con contundencia, pidiendo perdón en primer lugar y luego tomando conductas y procedimientos precisos para prevenir, juzgar y erradicarlas. En su visita reciente a Canadá (2022) el papa Francisco ha pedido perdón por la actuación de la Iglesia católica en los internados para las comunidades indígenas, donde los menores sufrieron abusos sistemáticos al amparo de una política estatal conocida como "asimilación forzosa".
"Los delitos de abuso sexual ofenden a Nuestro Señor, causan daños físicos, psicológicos y espirituales a las víctimas, y perjudican a la comunidad de los fieles. Para que estos casos, en todas sus formas, no ocurran más, se necesita una continua y profunda conversión de los corazones, acompañada de acciones concretas y eficaces que involucren a todos en la Iglesia". Carta Apostólica – Mutuo Proppio del Papa Francisco - "Vos Estis Lux Mundi" (2019).
Además de no ocultar el problema, su elocuente denuncia, ha sido plasmada en acciones concretas y procedimientos instituidos por el Papa Francisco, llevándose a cabo medidas preventivas, y procesos de sanción, expulsión y condena de sacerdotes, monjas o hermanos a lo largo de todo el mundo.
En Atender, informar y comunicar: son herramientas claves por un gestión eficaz en los casos de abuso sexual. En este marco, el Papa Francisco este 14/3/2023, si bien reconoció los pasos adelante dados por la Iglesia católica en la lucha contra los abusos sexuales de menores por parte del clero, dijo que hay que hacer más. "El trabajo de establecer procedimientos claros para la protección de las personas vulnerables en la Iglesia debe convertirse en una prioridad en cada iglesia local", dijo Francisco, que anunció que le pidió a la Pontificia Comisión para la Protección de los Menores (PCPM) que supervise la la aplicación adecuada del documento "Vos estis Lux Mundi", "para que las personas víctimas de abusos tengan vías claras y accesibles para buscar justicia".
Jóvenes (hagan lío)
Aquel recordando encuentro en la Jornada Mundial de la Juventud en Rio de Janeiro (2013) donde participaron más de 3 millones de jóvenes, y el Papa Francisco le pidió que "hagan lío". Francisco invita a los jóvenes a ser valientes y decididos para decir ‘sí’ al Señor como hizo María, que "se arriesgó y lo apostó todo cambiando su vida al seguirle". "Ustedes, los jóvenes que quieren construir un mundo mejor, sigan su ejemplo", insiste el Santo Padre.
También pide a la sociedad que "Nos hace falta crear más espacios donde resuene la voz de los jóvenes", reclamaba Francisco en la Exhortación Christus vivit. El Papa Francisco en Awali (Barei) 2-11-22, ante 800 jóvenes les dice: "Queridos jóvenes, los necesitamos, necesitamos su creatividad, sus sueños y su valentía, su simpatía y sus sonrisas, su alegría contagiosa y también esa pizca de locura que ustedes saben llevar a cada situación, y que ayuda a salir del sopor de la rutina y de los esquemas repetitivos en los que a veces encasillamos la vida. Como Papa quiero decirles: la Iglesia está con ustedes y los necesita, a cada uno de ustedes, para rejuvenecer, explorar nuevos senderos, experimentar nuevos lenguajes, volverse más alegre y acogedora.
Familia un divino tesoro
La alegría del amor se vive en la familia, con la encíclica Amoris Laetitia (2016) nos regala respuestas a ese anhelo de familia que permanece vivo en los jóvenes, motivando a valorar los dones de un amor fuerte y lleno de valores como la generosidad, el compromiso, la fidelidad y la paciencia. Es un aliento a todos en la vida familiar puedan encontrar la paz y el gozo (AL5). El amor que se manifiesta crece. Por eso, los gestos que expresan ese amor deben ser constantemente cultivados, sin mezquindad, llenos de palabras generosas. En la familia «es necesario usar tres palabras. Quisiera repetirlo. Tres palabras: permiso, gracias, perdón. ¡Tres palabras clave!. «Cuando en una familia no se es entrometido y se pide "permiso", cuando en una familia no se es egoísta y se aprende a decir "gracias", y cuando en una familia uno se da cuenta que hizo algo malo y sabe pedir "perdón", en esa familia hay paz y hay alegría (AL133).
La esperanza de una Iglesia que abra las puertas a todos, que escuche y acompañe las distintas realidades personales y familiares, es una mirada con gran misericordia impulsada por el papa Francisco, que sostiene y realza a la vez los dogmas de la fé y los sacramentos de la Iglesia.
La mujer en la Iglesia
El Papa Francisco destaca el rol transcendente que ocupan las mujeres en la sociedad, abogando por el reconocimiento pleno de sus derechos, para que no sólo se la respete siempre y en todo lugar, si no también para que sea posible generar el espacio para que desarrollen sus talentos y puedan así aportar su riqueza por el mundo.
"La Iglesia reconoce el indispensable aporte de la mujer en la sociedad, con una sensibilidad, una intuición y unas capacidades peculiares que suelen ser más propias de las mujeres que de los varones", EG103.
A la vez exige con convicción que el varón y la mujer tienen la misma dignidad" EG 104. "En el curso de estos últimos decenios, junto a otras transformaciones culturales y sociales, también la identidad y el papel de la mujer, en la familia, en la sociedad y en la Iglesia, ha conocido notables cambios y, en general, la participación y la responsabilidad de las mujeres ha ido creciendo.", Discurso del Santo Padre Francisco a las participantes en el Congreso Nacional del Centro Italiano femenino, 25 de enero de 2014. "La Virgen María era más importante que los Apóstoles, los obispos, los diáconos y los sacerdotes. La mujer, en la Iglesia, es más importante que los obispos y los sacerdotes; el cómo es lo que debemos intentar explicitar mejor", Conferencia de prensa del Santo Padre Francisco durante el vuelo de regreso a Roma, 28 de julio de 2013. El papa Francisco de llevado a cabo importante reformas en la iglesia, para ampliar los espacios de una presencia femenina. Las mujeres están formulando cuestiones profundas que debemos afrontar. La Iglesia no puede ser ella misma sin la mujer y el papel que ésta desempeña. La mujer es imprescindible para la Iglesia". Entrevista al Papa Francisco, 19 de agosto de 2013.
En este sentido podemos destacar la presencia mayoritaria de las mujeres en las iglesia, y no solo eso sino también la participación en la toma de decisiones, podemos recordar que el Santo Padre ha nombrado, entre los miembros del Dicasterio para los Obispos, a tres mujeres (2022), palabras, signos y acciones con un rumbo claro, reconociendo la necesidad del crecimiento de la responsabilidad y participación de ellas en la iglesia.
Cuidado y Protección de la madre tierra
Hoy, entre los más frágiles de los frágiles -es decir, entre los "pobres" - se encuentra también nuestra "hermana madre tierra", a la cual dedicó el Papa Francisco la encíclica Laudato Si (2015), que nos desafía a opciones de misericordia históricamente eficaz hacia la vida de los pobres y la tierra. Podemos ver lo que está pasando en nuestra casa común (Laudato Si 17 ss), contaminación, cambio climático, fuentes no limpias de energía, deterioro y escasez de agua, pérdida de la biodiversidad, ruptura de los ecosistemas, acumulación de basura, residuos tóxicos, la "cultura del descarte".
Pero las "razones por las cuales se contamina exigen un análisis del funcionamiento de la sociedad, de su economía, de su comportamiento, de sus maneras de entender la realidad", de modo que "estamos actualmente sumergidos no en dos crisis, sino en una única crisis social y ambiental -socio-ambiental- (LS15). Para la protección de la casa común, todo está relacionado (LS70), la comunión y el respeto basados en la dignidad humana, reconociendo a "la tierra esencialmente como una herencia común, cuyos frutos deben beneficiar a todos"(LS93), estamos llamados a cuidar a la persona y al ambiente, sin caer en la llamada "cultura del descarte"… Es evidente la incoherencia de quien lucha contra el tráfico de animales en riesgo de extinción, pero permanece completamente indiferente ante la trata de personas, se desentiende de los pobres o se empeña en destruir a otro ser humana que le desagrada (LS91).
Esta mirada ha brindado como fundamento y base para acciones de los países, ONG y organismos internacionales, en una mirada integral humana y protectora en defensa de la casa común, que nos sirve de guía, para VER la realidad, orientándonos para DISCERNIR y proponiendo ACCIONES concretas en la vida cotidiana.
Educación
Con la convocatoria a un Pacto Educativo Global (2019) el prelado Argentino, nos anima a caminar con valentía y esperanza basada en la solidaridad. "La educación es sobre todo una cuestión de amor y responsabilidad que se transmite de generación en generación. La educación, por lo tanto, se propone como el antídoto natural a la cultura individualista, que a veces degenera en un verdadero culto al yo y a la primacía de la indiferencia.
Nuestro futuro no puede ser la división, el empobrecimiento de las facultades de pensamiento y de imaginación, de escucha, de diálogo y de comprensión mutua. Nuestro futuro no puede ser este. Hoy en día se necesita una etapa renovada de compromiso educativo, que involucre a todos los componentes de la sociedad". Mensaje de Francisco el 15/10/20 Nos dice Francisco que "la educación es un factor humanizante del mundo, ya que ayuda a romper el individualismo, a apreciar las diferencias, a descubrir la fraternidad, a responsabilizarse del medio ambiente. Ella es «el antídoto natural de la cultura individualista que a veces degenera en un verdadero culto al yo y la primacía de la indiferencia. Es por ello, que el Pontífice subraya que lo que necesitamos actualmente es "capacidad para crear armonía" e invita a todos a adherirse a este Pacto Educativo Global, comprometiéndonos personal y conjuntamente a:
1- Poner a la persona en el centro. Todo proceso educativo formal e informal lo importante es la persona, su valor, su dignidad, poner de relieve su propia especificidad, su belleza, su singularidad y, al mismo tiempo, su capacidad de relacionarse con los demás y con la realidad que le rodea, rechazando aquellos estilos de vida que favorecen la difusión de la cultura del derroche.
2- Escuchar a las jóvenes generaciones. La voz de los niños, y los jóvenes a los que transmitimos valores y conocimientos, para construir juntos un futuro de justicia y paz, una vida digna para cada persona.
3- Promover a la mujer. Fomentar la plena participación de las niñas en la educación.
4- Responsabilizar a la familia. Ver en la familia al primer e indispensable educador.
5- Abrirse a la acogida. Educar y educarnos para acoger, abriéndonos a la los más vulnerables y marginados.
6- Renovar la economía y la política. Comprometernos a estudiar para encontrar otras formas de entender la economía, la política, el crecimiento y el progreso, para que estén verdaderamente al servicio del hombre y de toda la familia humana en la perspectiva de una ecología integral.
7 - Cuidar la casa común. Salvaguardar y cultivar nuestra casa común, protegiéndola de la explotación de sus recursos, adoptando estilos de vida más sobrios y buscando el aprovechamiento integral de las energías renovables y respetuosas del entorno humano y natural, siguiendo los principios de subsidiariedad y solidaridad y de la economía circular.
Papa reacciona, también, ante los intentos de separar la formación espiritual de la formación cultural, con el pretexto de que el estudio no sirve si no se tiene en cuenta algo concreto. Y justifica: «el estudio sirve para hacerse preguntas, para no ser anestesiado por la banalidad, para buscar sentido en la vida» (CV 223). Va a ser ineficaz y va a perpetuar el padrón de vida consumista la escuela que no se esfuerce por difundir un «nuevo paradigma acerca del ser humano, la vida, la sociedad y la relación con la naturaleza» (LS 215).
Nadie se salva solo
Durante la pandemia Covid-19 recordamos ese momento de incertidumbre generalizada, encerrados en nuestras casas, con temores y sin poder ver a nuestros seres queridos, quel 27 de marzo de 2020 cuando Francisco rezó en una Plaza de San Pedro desierta, El Papa, solo, sube la larga escalera que lleva a la Basílica, parece que esa tarde ha decidido llevar sobre sus hombros el peso de las oraciones y esperanzas de todo el planeta. Recordando que "Todos estamos en el mismo barco" y nos necesitamos, juntos podemos llegar al destino.
"Nos dimos cuenta de que estábamos en el mismo barco, todos frágiles y desorientados, pero al mismo tiempo importantes y necesarios, todos llamados a remar juntos, todos necesitados de consuelo. Todos estamos en este barco...". En momentos donde el individualismo y el egoísmo se imponen en las relaciones personales, familiares, laborales y de las naciones, el Papa Francisco nos regala la encíclica Fratelli Tutti (3/10/20), sobre la Fraternidad y la amistad social, invitándonos a la Cultura del encuentro, partiendo del reconocimiento del otro.
"La vida es el arte del encuentro, aunque haya tantos desencuentros por la vida" FT215 siempre rechazó las dialécticas que enfrentan, y su ideal es el poliedro, que tiene muchas facetas, muchísimos lados, pero todos formando una unidad cargada de matices. El poliedro es una sociedad donde las diferencias puedan convivir complementándose, enriqueciéndose e iluminándose unas a otras. De todos se puede aprender algo, nadie es inservible, nadie es prescindible.
Se trata de reconocerle al otro el derecho de ser él mismo y de ser diferente. Lo que propone Francisco es un "pacto cultural" que nos lleve a una cultura del encuentro. Un pacto cultural significa que se ha aprendido a reconocer al otro como otro: con su propia cultura, es decir con su propio modo de ver la vida, de salir adelante, de opinar, de sentir y de soñar.
En tiempos de guerras, el Papa Francisco, pidió, rogó, abogó, e intercedió para que haya PAZ, inclusive dijo que el mejor regalo para él, sería una PAZ duradera, refriéndose entre otros al conflicto en Ucrania – Rusia.
La guerra es un fracaso de la política, un fracaso de la humanidad, una claudicación vergonzosa, una derrota frente a las fuerzas del mal", aseguró Francisco El camino es el diálogo, entre naciones y entre religiones.
En este sentido el papa Francisco ha continuado con gran fuerza el diálogo interreligioso, fortalecido los lazos con cristianos, judíos, y el Islam, junto con otras religiones.
Visita a la Argentina
Hay un gran anhelo que es una visita del papa Argentino en su tierra natal, para recibirlo y regalarle nuestro cálido cariño. Podemos soñarlo pero sobre todo, compartamos juntos como pueblo la "cultura del encuentro", la apertura hacia el otro, una mirada fraterna y misericordiosa, cercana, sincera y solidaria. Rememos juntos en esta barca, quizás es mayor el desafío del encuentro que la llegada del papa a nuestra patria, pero sigamos intentando y pidiendo a Dios por ambas cosas, con humildad y sencillez siguiendo su ejemplo, entre todos podemos lograrlo.
Presidente de la Comisión Arquidiocesana de Justicia y Paz de Resistencia