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María Angélica Kees, ingeniera agrónoma

"El modelo hegemónico de producción nos está costando muy caro"

Más definiciones en la presentación del Congreso Argentino de Agroecología.  

“Soñamos este congreso antes del de Mendoza, incluso nos propusimos ser sede”, contó María Angélica Kees, presidenta de la comisión organizadora del evento que se presentó el viernes.

En un corto audiovisual la ingeniera agrónoma aportó una de las definiciones del Congreso Argentino de Agroecología: “Se está rediscutiendo el modelo productivo hegemónico que nos está costando muy caro para mantener la integralidad de nuestros bienes comunes y la salud de las personas”.

María Angélica Kees, presidenta de la comisión organizadora del congreso. Crédito: archivo

Al dar la bienvenida vía remota retomó la idea al pedir que se siga construyendo un camino en el que “la tierra y la semilla sean consideradas bienes sociales y no empresariales al servicio de grupos hegemónicos que definen la vida y la muerte de muchas personas”.

Kees recordó que hablar de agroecología implica habilitar un diálogo de saberes en un proceso que involucra a las universidades, donde se asume que está el saber más científico, y al campesinado, otro saber igual de relevante por su historicidad.

“Esperamos llevar al congreso nuestros saberes y un debate social sobre un modelo actual con el que no acordamos. Estamos convencidos de que otro mundo es posible”, invitó.

Alternativa amigable con el ambiente    

Por Incupo Jorge Solari, integra  del equipo de prensa y explica a NORTE parte de los fines que se proponen al impulsar un congreso agroecológico.  

“Es una mirada sobre los procesos productivos en general y los relacionados con la agroecología, y sobre un modelo productivo que está presentando problemas”, expone.

Entre ellos menciona los ya conocidos casos de contaminación en general y especialmente en alimentos, y las fumigaciones aéreas sobre escuelas próximas a sembradíos.

Además está el aumento de plagas, que cada vez son más resistentes a los agroquímicos. Al punto de que ahora hay productores algodoneros que reclaman porque se aplican plaguicidas en cultivos de soja que generan efectos muy perjudiciales para el algodón.  

Presentación de experiencias

 “Hablamos sobre cuáles son los costos y beneficios de la principal actividad productiva del país; y también de una salida amigable con el ambiente y que sea rentable”, enuncia.  

Las exposiciones virtuales en octubre incluirán conferencias de profesionales, mesas redondas con técnicos y productores, aunque la principal herramienta es la presentación de experiencias. Un comité trabaja por estos días para animar y ayudar a que más gente cuente y muestre su experiencia.

Otro sistema de certificación 

 Incupo respalda a los consejos de certificación participativa, que son espacios para posibilitar que donde haya producción agrícola se forme una mesa con el municipio y el Inta, para fijar acuerdos agroecológicos.

Algunos de esos procesos ya se llevan adelante en Corrientes, Chaco y Misiones. A diferencia de la certificación orgánica, que es costosa, la agroecológica se realiza a través de los mismos productores, de forma cruzada y con un acompañamiento durante el desarrollo de cada cultivo, recomendaciones sobre usos y control de plagas. “La experiencia de Bella Vista es nuestro fuerte y también en biofertilizantes”, agrega Solari.   

Otro aporte es en la organización regional para sostener una red agroecológica con instituciones como IIFA, por ejemplo; o para promuevan encuentros e intercambios.

Alianza con las universidades    

La participación de representantes de seis universidades en el anuncio (entre las que estuvieron la UNNE, Uncaus y UTN) no fue azaroso: son parte de los acuerdos necesarios para la formación de los ingenieros agrónomos.  

“Cuando un productor pregunta: 'si no es de esta forma, ¿qué otra hay?'; ahí es donde se les complica responder a quienes los asesoran. En la actualidad en el país, cada 50 establecimientos uno es agroecológico”, contrasta Solari. 

Beatriz Zimunich, del movimiento semillero de Misiones.