Huevos para alimentar a los chaqueños: el desafío de los pequeños productores
El reto de pequeños productores chaqueños que quieren hacer su aporte en medio de la pandemia de Covid-19. El mundo va cambiando de hábitos y costumbres, que también se ven en la alimentación. La falta de recursos para producir más y la necesidad de afianzar un cluster de producción en el interior son las principales demandas.
SÁENZ PEÑA (Agencia, Por Hipólito Ruiz). Adolfo Antonio María está convencido de que a partir de la producción de huevos para consumo se pueden alcanzar dos objetivos claramente definidos: llegar a la población con un alimento necesario y que esa actividad le pueda ser rentable para no quedarse en el camino.

En plena pandemia por el coronavirus, el campo argentino sigue demostrando que es el motor de la economía y que puede producir alimentos. Y, en el Chaco, la actividad avícola de consumo en pequeñas escalas está demostrando que puede hacer un buen aporte a las comunidades.
“Yo arranqué con mil trescientos gallinas junto a un socio. Trabajamos dos años y medio y nos dividimos, y ahora estoy con casi quinientas y la verdad que no doy abasto, se vende todo”, dice a NORTE RURAL mientras acomoda un balde con alimento balanceado en su predio ubicado en el paraje El Caburé, entre Villa Angela y Mesón de Fierro.
LA PRODUCCIÓN
El caso del pequeño productor María es indicador de lo que sucede en la mayoría de quienes producen en esta escala. Tiene una producción de 10.000 huevos para consumo en forma mensual, dependiendo de las condiciones ambientales, como es la luz, los ruidos, la temperatura. Cada jornada recoge entre 300 y 350 huevos, “lo que hacen 10 cartones diarios”, cuenta, que van al mercado local de Villa Angela, y no puede abrir más la oferta porque “no tengo estructura”, dice.
UN ALIMENTO NUTRITIVO
El huevo es un alimento muy práctico y altamente nutritivo. Son fáciles de preparar, combinar y consumir ya sea como parte principal o como ingrediente de todo tipo de platos como desayunos, ensaladas, pastas y postres.“El huevo tiene una alta demanda en nuestra provincia, lo vemos cuando recorremos las comunidades en general y esto se lo puede corroborar con cualquier puesto de ventas de frutas y verduras, el huevo tiene una salida tremenda”, dice a NORTE RURAL el ingeniero José “Pepe” Rafart, director de la estación experimental del INTA Las Breñas, que vienen desarrollando un sostenido apoyo a pequeños emprendedores.
“NECESITAMOS INFRAESTRUCTURA”
“Tiene mucho que ver el bienestar animal para producir más”, dice Adolfo María. Su tipo de producción es solo un caso testigo de al menos una veintena de pequeños emprendedores en el Chaco que intentan desarrollar una actividad como la de producir huevos para consumo.

María observa que esa demanda está sujeta a la capacidad de producción. “Es necesario que podamos tener algún soporte financiero para encarar una mayor infraestructura, y alojar una mayor cantidad de gallinas”, señala.
“No es producir huevos a cualquier costa, porque es necesario tener las instalaciones para que las gallinas no sufran tanto calor en verano y tanto frío en invierno, sino que tengan su protección y a ello todas las condiciones sanitarias y de alimentación: si la gallina tiene bienestar la producción de huevos para consumo será extraordinariamente mejor”, sostiene.
“CON MUCHAS GANAS DE PROGRESAR”
“Soy un pequeño productor, hijo del productor y con ganas de progresar y de trabajar y de crear puestos de trabajos, y sé que hay varios como yo en el Chaco”, señala en diálogo con NORTE RURAL.
“Quisiera que mi ejemplo sirva porque sé de muchos pequeños emprendedores que están en mi misma situación y podríamos pensar, podríamos soñar con aportar con un alimento a la comunidad sobre todo en momentos como este de la pandemia que va dejando secuelas muy grandes, y nosotros aquí en el Chaco lo estamos padeciendo como en todo el mundo”, dice.