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TENSIÓN EN LA RUBITA

Un grupo de ocupantes pide la intervención para evitar el desalojo

En caso de que el predio no quede libre en las próximas horas se usará la fuerza. La orden ya está dada por parte de la jueza federal.

Ante el inminente desalojo varias familias que siguen ocupando los terrenos de La Rubita pidieron este viernes la intervención del Estado para evitar choques con las fuerzas de seguridad y las autoridades.

Familias que ocupan La Rubita esperan una mediación pero el desalojo no tardará en producirse.

A su vez solicitaron que se realice un nuevo censo. “Hay un sector que no fue relevado durante los operativos que hicieron tanto Desarrollo Social como la Secretaría de Derechos Humanos”, indicaron.

Sin embargo, las opciones son pocas. Y las autoridades fueron taxativas al afirmar: “durante el fin de semana abandonan pacíficamente el predio o a más tardar el lunes se procederá al desalojo”.

Hay que tomar en cuenta que la orden está firmada por la jueza Zunilda Niremperger pero las autoridades confían en que el diálogo permitirá que se retiraren las pocas familias que siguen en el predio que está en manos de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (Aabe).

La decisión de desalojar está tomada por parte de la Justicia y un antecedente cercano demuestra que esta se cumplirá aun si la ejecución genera heridos entre manifestantes y policías.

Ahora esto no implica que surjan algunas opciones pero de momento parece que la única salida es que los ocupantes se retiren del lugar sin recibir una compensación concreta, más bien podrán aspirar a que el 10 de diciembre sean tomados en cuenta por las nuevas autoridades.

EL CONFLICTO

El 21 de septiembre sesenta familias se instalaron en el predio y si bien hubo una rápida reacción no pudieron desalojar el terreno.

Poco después comenzó el trámite de desalojo y no bien actuaron surgió un problema: definir la competencia.Finalmente como el predio es de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (Aabe) actuó la jueza federal Niremperger. La jueza en su momento ordenó el desalojo pero poco después desde el gobierno provincial pidieron suspender la medida.

Las actuaciones lograron que un grupo se retire del lugar pero otro sector se quedó y ahora en poco tiempo más, en caso de que el predio no quede vacío, se procederá al uso de la fuerza.

Los funcionarios consultados informaron que “si no dejan el predio se desalojará por la fuerza”, tarea que quedó en manos de la Policía del Chaco.