El repunte del Paraná llegó a un pico y la humedad augura lluvias en el corto plazo
El curso de agua superó los cinco metros en Barranqueras.
5,26 metros fue la altura del río Paraná en el puerto de Barranqueras ayer, una cifra impensada hace un tiempo producto de la falta de las precipitaciones que tiene su origen en el fenómeno de La Niña que llevó a una serie de complicaciones de operatividad y de cotidianidad.

NORTE dialogó con el ingeniero en Recursos Hídricos y docente de la cátedra de Hidrología de la UNNE, Hugo Rohrmann, que explicó que se trata de una excepcionalidad que es bienvenida por lo que lo antecedía pero que en el corto plazo los valores irán normalizándose.
"Debido a las lluvias en las altas cuencas brasileñas creció el Paraná a niveles inusuales para esta época del año pero a partir de la semana que viene empezará un lento descenso", avizoró.
Siempre en función de la combinación de experiencia y conocimiento, Rohrmann precisó que es está en presencia del fin de la última gran bajante que se extendió por unos años en la zona.
"Estimamos que se estacionar alrededor de los 4 metros, 2023 se considera que será un año de transición entre el déficit y lo habitual para que en 2024 pueda presentarse como un período normal o con alguna eventual crecida", comentó.
LLUVIAS
Consultado acerca de lo que se espera en cuanto a precipitaciones, expresó que para este mes y abril hay condiciones que permiten inferir situaciones más habituales a los ciclos históricos.