CARTA DE LECTORES
Se necesita seguridad concreta en los cajeros
Señor director de NORTE:
Desde hace algunos años, han venido aumentando, al menos en Resistencia, los cajeros con "vigías dudosos" flanqueando las entradas a nuestros cajeros automáticos: vos te vas al cajero, y te topás con una o dos (o más, a veces) personas paradas o sentadas bien al lado de la entrada pidiendo algún dinero de ayuda al salir, algunos incluso con un frasco de alcohol en spray con el que te ofrecen rociarte las manos por el covid mientras te piden "una ayudita cuando salga del cajero". No cuestiono para nada que esta pobre gente pida ayuda económica adonde sea adecuado para todos, pero como extrabajador de seguridad privada bancaria y como usuario, sí me molesta y mucho encontrarme las entradas a los cajeros casi piqueteadas con una persona o dos o tres de esas características que encima ya están viendo cuando viene el blindado a cargar el cajero, cuanta gente se junta en los distintos horarios, quienes son habitués de tal o cual cajero, con qué regularidad van determinadas personas, y hasta pueden ver —si son detallistas— si alguien pone una o más tarjetas, cuánto tarda y cuánto ruidito de conteo hace la máquina y más o menos cuánta plata extrae una persona; es decir, van juntando datos que le pueden servir a todo tipo de malandras que abundan en la ciudad para asaltar a los clientes del banco.
Para colmo, ni siquiera se ubican a una distancia de la entrada prudencial y segura para el público (que debería ser de mínimo 5 metros, aunque por seguridad nunca debería haber gente extraña a la actividad de los usuarios parada o sentada más de unos minutos en esos lugares), sino justo al lado, pegados al borde de la puerta, lo que ya es una total falta de respeto, además de una garrafal falla de seguridad de los cajeros y los bancos. Y a esto se agregan otros "detalles pintorescos", como el del cajero de avenida Lavalle y Mitre (Paseo de Compras), donde suele establecerse un individuo muy educado con su frasco de alcohol en spray pero que todo el tiempo está cantando chamamé en voz alta, mientras uno cuando entra está calculando la cantidad que debe extraer y las cosas que debe pagar con eso, etc., interrumpido por el tipo cantando a solo un metro detrás.
Y otro caso ya insólito es nada menos que los cajeros del Nuevo Banco del Chaco central (Yrigoyen y Güemes, que debería contar siempre con guardia policial en la entrada del cajero, no con esta gente sospechosa) donde a un lado de la entrada se instala una mujer con dos o tres criaturas, con el marido al lado, y del otro lado de la puerta se instala otro Juan de los Palotes, amigo de la pareja aparentemente, y cuanto llegas a la entrada te abarajan pidiendo de ambos lados y cuando no les das ya se miran entre ellos molestos porque no les diste. Pero estos, además, hasta se toman la atribución de ir diciéndole a la gente de la fila: "Pase a aquel cajero que se desocupó", "Pase a ese cajero de allá", y así dirigiendo a la gente, cosa que directamente me pone violento y ya una vez le conteste a uno de esos: "¿A vos qué te importa a cual cajero quiero pasar, quien te autoriza a controlar así la entrada?", y me contestó: "Disculpe, señor, le avisaba nomás", pero me saca de quicio esta falta total de respeto y la total inseguridad de todos esos cajeros, lo cual no se justifica en esta época en que se toman tantos recaudos contra entraderas, asaltos y robos.
Bueno, espero que el ministro de Justicia, y/o la Jefatura de Policía, y/o el Directorio del Nuevo Banco del Chaco y otros bancos, se tomen muy en serio este reclamo público (compartido por la mayoría, me imagino) e instrumenten cuanto antes una medida concreta prohibiendo la permanencia de personas ajenas al Banco de cada cajero a menos de 5 metros de la entrada de cada uno de ellos, a excepción, obviamente, de los usuarios de cada banco. Dejemos de permitir que las entradas de los cajeros sean caldo de cultivo de nuevos asaltos y desgracias como el asalto del cajero ubicado en Reggiardo entre Güemes y Pellegrini hace un tiempo, ocasión en que colaboré con la policía aportando las imágenes de mis cámaras de seguridad externas para la investigación de la causa.
JULIO DANIEL ZACARÍAS
DNI 13.719.312
Resistencia