Resistencia: una venta de empanadas que se volvió viral y alegró a una abuela
La campaña impulsada por una de las nietas de Eva Ojeda, una costurera de Villa San Martín, para comprarle un aire acondicionado tuvo una repercusión inesperada y logró su objetivo
La repercusión de una nota publicada por NORTE sobre una venta solidaria de empanadas el domingo pasado para comprarle un aire acondicionado a una jubilada de Villa San Martín tuvo repercusiones impensadas y se volvió viral.
En una entrevista con NORTE Play, Eva Ojeda, la protagonista de la historia, contó que la idea fue de Victoria, una de sus nietas, quien quiso ayudarla a comprarle el primea aire acondicionado de su vida.
A los 76 años, Eva cuenta que por cuestiones económicas nunca pudo comprarse un aire y que le hizo frente a tantos años de intenso calor solamente con un ventilador. "Otra cosa nunca tuve, uno por el costo de la luz, que sale muy caro y nuestro sueldo muchas veces no nos alcanza para nada", se lamentó.
La venta de empanadas fue todo un éxito ya que se vendieron todas, pero eso no es todo. Una persona decidió donarle el split y además pagar el costo de instalación. Por lo tanto, la campaña logró más que un objetivo.
"Mediante el diario NORTE me regalaron un split y la instalación. Y mi nieto que vive en Formosa me mandó 6 mil pesos, si hubiera estado acá me hubiese dado un poco más", relató Eva, sentada bajo la sombra de un árbol de mango en su casa de Villa San Martín. "Estoy muy agradecida con todos los que colaboraron, es impresionante lo que pasó", expresó.

COSTURERA Y CURANDERA
Eva tiene una jubilación de amas de casa. Lo que cobra mensualmente no es suficiente por lo cual sigue trabajando de una actividad que hoy escasea: la de costurera. "Con mi sueldo no se puede hacer nada, quien vive con 25 mil pesos", se pregunta.
Las costuras le permiten ayudar con su economía diaria y además solventar los gastos de medicamentos ya que es diabética. "Tengo varias enfermedades pero siempre me las arreglé, siempre luché y trabajé, hasta ahora sigo trabajando con las costuras", afirma.
Además, recuerda que también la conocen en el barrio por ser "curandera" y se muestra orgullosa de eso. "Curo el empacho, dolor de cabeza, nervios, el ojeo a los bebés. Viene mucha gente, hasta curo a personas que viven en Buenos Aires o Bahía Blanca por su nombre, y a los 30 minutos ya están sanas", señala.
POR UNA HELADERA Y LAVARROPAS
Los electrodomésticos le vienen jugando una mala pasada a Eva, ya que ahora se le rompió su vieja heladera y el lavarropas. Por lo tanto, su nieta Victoria, adelantó que las ventas de empanadas seguirán para poder acceder a dichos electrodomésticos indispensables.
"Con la edad que tengo ya no me quieren dar crédito porque dan hasta los 69 años y yo tengo 76", recordó. Y con cierta vergüenza, se animó a pedir una ayuda más. "Mi heladera es chiquita pero me duró 14 años, me la compré cuando apenas me jubilé. Si alguno tiene alguna heladera que no la use puede donarme o venderme, para poder guardar la comida y el agua fría", solicitó.
Para quienes estén interesados en colaborar con esta nueva causa pueden comunicarse con Victoria al 362-4217321.