La creciente movilidad no logra repuntar las ventas
Aunque el microcentro de Resistencia se observe cada vez más concurrido, ni el “traslado” de la fecha clave para un buen movimiento de caja alcanzó el objetivo.
El resultado se sabía de antemano. Una serie de factores que actúan al mismo tiempo llevaron a que el comercio capitalino no pudiera capitalizar, ni aun en este contexto de restricciones, una de las fechas más importante para la comercialización como es el Día del Padre.

Las buenas intenciones no alcanzaron con la manipulación del calendario y promover el ‘traslado‘ de la celebración del tercer domingo de junio a hoy, y esto se observó en todos los días previos.

En la gente la modificación sirvió solamente para bromas en redes sociales y el compartir memes por aplicaciones móviles, mientras que para el comerciante la internalización fue similar, lejos de tener una mirada optimista y generar incentivos de venta en la mayoría de los casos se limitó a conservar las vidrieras adornadas que pensaron para el 21 de junio y dejarlas hasta ayer.

En la otra cara de la moneda, la de movilidad ciudadana, las postales que dejó el sábado son similares a las de jornadas anteriores en el microcentro capitalino, una gran cantidad de personas recorriendo la peatonal pero el grueso con la concepción de tomarlo como momento de distracción y recreación y no tanto en la búsqueda de la compra de un determinado producto.

Y prueba de ello es que a pesar de que un gran número de locales se encuentran imposibilitados de funcionar por no estar dentro del rango de esenciales, un gran número de individuos recorre diariamente la principal zona comercial que tiene Resistencia.