A la laguna de Villa Chica no se le ve el agua desde hace años
El impuestazo ejecutado por la intendencia a los resistencianos no tiene una contrapartida de mejores servicios. En el caso de las lagunas de la ciudad, la inacción es total
Las lagunas de Resistencia no parecen formar parte del plan de acciones de la municipalidad. Días atrás NORTE reflejó el lamentable estado del parque de la laguna Argüello, y ahora llegó el turno de mostrar el cuadro de total abandono que exhibe la laguna de Villa Chica, cuyo espejo de agua está absolutamente tapado por camalotes y otra vegetación.

Eso viene ocurriendo desde hace años, ya que no solo la gestión del intendente Gustavo Martínez descuidó el paseo, sino también la de Jorge Capitanich.
SIN RESPUESTAS
Los vecinos de la zona dicen que desde hace tiempo se rindieron y dejaron de llamar al municipio para pedir que limpien la laguna. “Es una lástima, eso parece un baldío gigantesco, no una laguna”, cuestionó Pablo, que tiene un pequeño comercio en el barrio.

Durante la gestión de Aída Ayala la laguna fue realzada, porque se pavimentó la avenida Rivadadia y se construyó el puente que, a pocos metros de la Escuela Primaria 600, permitía una vista espléndida del agua.
Pero la limpieza del lugar se fue haciendo cada vez menos frecuente, y lo más habitual fue encontrar la laguna cubierta de vegetación.
La situación se volvió normal. Pese a las promesas de campaña, la nueva administración no cambió esa realidad. Lamentable.