Crimen del penitenciario: previamente se produjo un altercado
Los detenidos habían interrumpido un partido de fútbol en el que participaba la víctima. Minutos después fueron a buscarlo.
Martínez se encontraba en ese quiosco junto a los allegados con los que hasta un rato antes había estado jugando un picadito, en una canchita de las cercanías cuando, pasadas las ocho de la noche, llegó un auto del cual descendieron varias personas, algunas de las que atacaron a Martínez asestándole varias puñaldas que le costaron la vida.

La situación fue observada por un efectivo policial de la comisaría Tercera que pasaba por el lugar, el cual efectuó disparos contra la pandilla cuando emprendía la fuga en el Gol Trend en el que había llegado.

El suboficial penitenciario cayó en la avenida herido de muerte, desenlace que se produciría instantes después, antes de la llegada de los servicios de emergencia.
Mientras tanto, el Gol Trend del grupo violento se dirigió hasta el Hospital Perrando, donde la guardia policial los demora y nota que dos de ellos estaban heridos, uno de arma de fuego, presuntamente por los disparos efectuados por el policía de la Tercera que intervino.
En total eran cinco los que iban en el auto, cuatro hermanos de apellido Concha de 17, 18, 21 y 44 años, y uno de 16 de apellido Gómez, todos los que quedaron bajo custodia y detenidos por su presunta participación en el hecho.

Asimismo se secuestró el auto, y dentro del mismo varias armas blancas, una de estas manchada de sangre.
Hasta ayer se desconocían mayores detalles que pudieran dar cuenta de alguna enemistad previa entre la víctima y los presuntos victimarios.
Sin embargo se supo que durante el partido de fútbol que minutos antes disputaban Martínez y otras personas, estos cuatro hermanos y el quinto joven llegaron a la canchita en el mismo auto, descendieron y mantuvieron un altercado con los presentes, hasta que se vieron obligados a retirarse del lugar.
Un rato después, la pandilla volvería, pero esta vez las consecuencias serían drásticas.