Para ver esta nota en internet ingrese a: https://www.diarionorte.com/a/198427

Ocho meses de pandemia en el Chaco: la desescalada de los principales indicadores 

El Consejo Provincial de Desescalada presentó datos de la semana epidemiológica 35, al cumplirse ocho meses desde la notificación de los primeros casos en el Chaco. La evolución y las mejoras logradas.  

A ocho meses del inicio de la pandemia, con los primeros casos notificados en el Chaco el día 9 de marzo, la provincia logró una mejora en todos los indicadores epidemiológicos y puso un freno al avance del virus, lo que fundamenta el progreso hacia la denominada "nueva normalidad", con la mayoría de las actividades económicas y sociales flexibilizadas y permitidas.

La novedad que presenta el análisis de los datos de la semana epidemiológica 35 es la tendencia a la baja en los casos del interior provincial, que se habían disparado previamente y generaban especial preocupación por la evolución puntual en algunas localidades.

Durante estos ocho meses, hasta la semana 35, se recuperaron el 90,3% de las personas que se infectaron con coronavirus. Mientras que 6,6% de los casos permanecen activos y un 3% fallecieron. En términos absolutos, se registraron hasta la semana en análisis 15.095 contagios, con 2860 personas que debieron ser internadas y 460 fallecidos.

El total de internaciones representa un 18,9% sobre el total de casos confirmados. Sobre el total, 1401 fueron internaciones hospitalarias (49,65%) y 1459 extra hospitalarias (50,34%). Entre las internaciones en hospitales, 734 fueron casos moderados (52,5%) y 667 graves (47,5%), de los cuales 460 fallecieron (68,9%).

Por otra parte, la edad promedio de los contagiados presenta una tendencia a la baja en la última semana, ubicándose en 42 años. Y la edad promedio de los fallecidos tiene una tendencia creciente, ubicándose en 72 años.

Propagación controlada 

Entre los indicadores que son tomados como referencia para el análisis de la situación epidemiológica se anota el R0, un índice propagación secundaria que indica el número esperado de casos secundarios causados por cada infectado individual, representado como una función del tiempo. 

El peor momento en la provincia fue cuando el R0 se ubicó en 1,86, en la primera semana epidemiológica durante marzo. Tras las restricciones en ese período, logró descender por debajo de 1 (0,95) a principios de abril, pero luego mostró picos hasta llegar a 1,46 en mayo. A partir de octubre se logró una estabilización y reducción por debajo de uno en las últimas semanas hasta ubicarse en 0,89 como promedio por semana. 

Es importante saber que este número de reproducción dependiente del tiempo, Rt, es un importante parámetro para evaluar si los esfuerzos de control actuales son efectivos o si se requieren intervenciones adicionales. Si el valor de Rt permanece en el tiempo por debajo de uno, el brote se extinguirá. Pero si el Rt es mayor que uno, un brote sostenido es probable que permanezca.

Según remarca el documento analizado por el Comité de Desescalada, de haberse mantenido el R0 en 1,24 desde la semana 14 (en junio) hasta la fecha, los casos acumulados serían 10 veces superiores, con un inminente colapso del sistema sanitario.

Otra variable que aporta al análisis es el tiempo de duplicación, de utilidad para evaluar la dinámica de las enfermedades en epidemias. Estima cuánto tiempo le llevará a la provincia duplicar su número de casos. Si la velocidad de aparición de casos aumenta, el tiempo de duplicación será más bajo, es decir, será menor el tiempo necesario para tener el doble de casos. Por el contrario, si la velocidad de aparición de casos se reduce, el tiempo de duplicación aumentará. 

En las primeras semanas de aparición de casos, el tiempo de duplicación era de sólo 2,5 días. Luego de permanecer seis semanas en un valor un promedio diario entre 26,8 y 27,2 días de duplicación en la semana 18 (durante julio), este indicador tomó un valor promedio de 40 días. En la semana 35, el promedio diario es de 81,3 días, el más alto en ocho meses. 

Según explican los especialistas, el crecimiento de este número es exponencial y su tiempo de duplicación constante al inicio de la epidemia. Pero luego, al depender de las dinámicas poblacionales, intervenciones de salud pública, cambios en la población de susceptible a ser inmunizada, se espera que el mismo no se mantenga constante. Es por ello que resulta un buen indicador de la efectividad de las medidas de contención y resulta útil conocer su variación en el tiempo para planificar las intervenciones de salud pública.

Otros parámetros 

La tasa de contagio mide la velocidad a la que crece el total de casos confirmados desde el inicio de la pandemia. Así, la curva desde el inicio hasta la fecha se presenta en forma de L, marcando el número máximo en marzo con 27,1% y llegando a 0,86% en última semana bajo análisis. 

El incremento de la velocidad de contagio observado en la semana 14 (junio) alcanzando un valor de 3,2% promedio diario motivó medidas de restricción total con el objetivo de evitar un incremento exponencial del total de casos acumulados.

Durante las semanas siguientes, 15 y 16, la tasa de contagio se mostró estable en torno a un valor de 2,7%. En la semana 35, el promedio diario de la tasa de contagio se ubicó por debajo de 1%. El descenso se evidenció a partir de la semana 17 (principios de julio), con un valor de 2,6%. En la semana 18, el descenso se hizo más marcado, registrando un valor de 1,7% promedio diario. 

Por otra parte, aparecen las consultas recibidas por el sistema sanitario. El total de consultas obtenidas en forma diaria creció sostenidamente durante las últimas 4 semanas, hasta alcanzar un pico en la semana 22 (agosto) registrando un valor 425 demandas diarias. A partir del valor registrado en la semana 18 se observa un crecimiento sostenido en cada semana. Y en la semana 35 el promedio diario de consultas obtenidas es de 482. El pico se dio en la semana 33 (octubre) con 705 consultas diarias. 

Testeos y letalidad 

Los testeos, muchas veces un factor cuestionado de la política sanitaria, totalizan en ocho meses de pandemia 79.108 en la provincia. De ese total, la mayoría fueron por PCR (73.421). Se destaca que por Autotest hubo 1.284.072 registros con 304.239 personas que lo utilizaron. 

Observando la evolución de los testeos promedio diario, en número más bajo en el inicio de la pandemia fue de 36 por día escalando hasta un pico de 836 en la semana 34 (octubre) y bajando a 664 en la actual semana analizada. 

Analizando el porcentaje de positividad, la evolución presenta varios picos en los promedios diarios siendo el más elevado en la semana 32 (octubre) con 23,6% y bajando hasta el actual 18%. Este indicador muestra la proporción, en términos porcentuales, de los casos detectables sobre el total de muestras realizadas en la semana.

Letalidad 

El porcentaje de letalidad es una de las variables que se ha mantenido constante, pero en un nivel elevado en la provincia. Tras un inicio ubicándose en 23% de promedio diario por semana, se estacionó en torno al 3% a partir de la semana 26 y hasta la actualidad. 

Por otra parte, observando la evolución de los casos nuevos diarios, en promedio, se confirma el pico en 191,4 en la semana 32 (octubre) para luego descender al actual nivel de 123 casos positivos por día en promedio. Mirando la distribución geográfica, el área metropolitana del Gran Resistencia presentó el pico de la evolución con 99 casos promedio en la semana 30 para descender al actual 46,7. Mientras que, en el interior, tras el pico en la semana 33 con un promedio diario de 121,4 casos, se destaca una baja pronunciada hasta los actuales 76,3.