Alejo Toledo sumó su calidad y experiencia a Estudiantil Porteño

Alejo Toledo, el buen jugador de Villa San Martín, no integra este año la platilla de la entidad, ya que se radicó temporariamente en Buenos Aires para hacer la especialidad de oftalmología, luego de haberse recibido hace un tiempo de médico en la UNNE.

Este equipo de Ramos Mejía le ganó en el último partido a Huracán de San Justo por 84 a 46, y la figura fue precisamente Toledo con 29 puntos, con una destacada actuación, dice la página del club en Facebook.

El equipo conducido por Daniel Piputto se recuperó tras dos apretadas derrotas (donde también se destacó), y en la nota de referencia hace un análisis del equipo, su potencial y los objetivos.

Ante la consulta de los colegas, hizo referencia a sus antecedentes:

“Me inicié como jugador en Villa San Martín de Resistencia, arranqué más o menos a los 4 años a practicar en la categoría mosquitos. Y jugué ahí toda mi vida, pasando por casi todas las categorías del básquet desde Provincial a Prefederal, Federal y por último TNA o Liga Argentina, vistiendo siempre los mismos colores, hasta mi llegada a Porteño hace unos meses.

En cuanto a su vinculación con el club, relató: “Se dio por medio de mi representante, yo me venía a vivir a Buenos Aires porque soy médico y quiero realizar la especialidad de oftalmología en un hospital de CABA. Así que me contacté con Mariano Nobile y le pedí que me busque un club que sea cerca de Capital, donde yo pudiera entrenar solo de noche, para dedicar la mañana y la tarde a mis estudios. Me contactó con la gente de Porteño, quienes rápidamente se comunicaron conmigo, tanto el presidente como el técnico y me gustó la propuesta de integrar un plantel donde todos los jugadores realizan su profesión durante el día (ya sea estudiar cómo trabajar). Y ellos a su vez, buscaban un jugador de mis características para poder completar el perímetro, así que desde el primer momento hubo una buena relación con la dirigencia por lo que se hizo más fácil mi llegada”.

Ya desde hace un par de meses en la entidad del conurbano bonaerense, la consulta final es cómo se siente con su decisión.

“La verdad que muy bien. El club cuenta con todas las comodidades para poder trabajar, y tanto los dirigentes como el cuerpo técnico y mis compañeros me trataron de forma excelente desde el primer momento que llegué a Ramos Mejía. Mi adaptación a la ciudad y al grupo se hizo mucho más fácil sabiendo que vengo de una ciudad donde se manejan otros tiempos”.